Por Carlos Santibañez
En la actualidad, es importante contar con seguridad ante virus, ante un posible daño a la maquina en la cual tenemos toda nuestra información o inclusive solamente por la necesidad de poder acceder a nuestra información de una forma más fácil y desde cualquier lugar del mundo solamente contando con una conexión a internet, se cuenta con el servicio de hosting, específicamente el hosting de un servidor en la nube para cubrir con todas estas necesidades.
Un Servidor Virtual Privado (VPS) es un tipo de servicio de hosting compartido generado a partir de la partición de un servidor físico en varios servidores para diferentes clientes con configuraciones diversas.
En cambio, un servidor dedicado está formado por una sola máquina exclusiva para el cliente, no es compartido por otros clientes.
1. Más flexibilidad
Debido a que el servidor privado virtual funciona como tener tu propio servidor, tendrás más control sobre qué sistema operativo y aplicaciones deseas instalar sin interferir en los recursos de alojamiento de otros usuarios, o al revés.
2. Altamente confiable
En un modelo VPS, las actividades de otros usuarios en el servidor no afectarán a tu sitio web. En caso de que tengas problemas con tu espacio en disco, ancho de banda, RAM y otros, esto no tendrá ningún efecto en los recursos del servidor
3. Rentable
Si deseas tener tu propio servidor web, un Servidor Privado Virtual ofrece la mejor seguridad y control total sin quebrar tu economía.
4. Seguridad óptima
A través de la virtualización, un servidor privado virtual garantiza que incluso si compartes el servidor con otros usuarios, estás restringido dentro de tu propio entorno de servidor privado.
5. Escalable
Si estás esperando un aumento en el tráfico de tu sitio web o planeas hacer crecer tu negocio en línea, es importante poder escalar tus recursos de alojamiento sin causar ningún tiempo de inactividad o problemas técnicos en tu sitio web
